martes, 11 de diciembre de 2012

Revoluciones

Sabíamos que no podríamos mantener la igualdad,
simplemente no existen recursos suficientes para todos
si algunos queremos privilegios, algunos deben tener carencias…
disculpábamos nuestra buena suerte ayudando de vez en cuando a aplacar esas necesidades,
para dar un rato de alegría, solo un poco de bienestar.

Los que vivimos en la época de a igualdad y la era la carencia generalizada sabíamos lo duro que era vivir sin aquellos lujos que queríamos, y decidimos hacer lo posible por que nuestros hijos no pasaran por eso, les dimos todo lo que necesitaban, el conocimiento, la educación, los alimentos… les dimos tanto que no necesitaron nada, y finalmente no hubo objetivo ni una meta que alcanzar.

En cambio los que vivimos la carencia, no quisimos que nuestros hijos vivieran de la misma forma, así que los hicimos conscientes de lo que faltaba, y el objetivo que era estar en la parte privilegiada de esta falta de igualdad.

Y así, aquellos afilados por la necesidad, lograron imponerse frente aquellos que no sabían lo que eran necesitar, y todo dio la vuelta, los que estuvieron abajo, ahora están arriba, educando a sus hijos, y procurando que a ellos no les falte nada de lo que en su juventud les faltó, en cambio los hijos de los favorecidos, ahora abajo, educan su descendencia con el objetivo de volver a donde estaban.




Y asi... una y otra vez.

-Kmo